4/3/12

Releyendo a Beverly Serrell- Exhibit labels


Cuando releo un libro vuelvo a ciertas páginas que ya conocía. 
Entro sin sombrilla y en busca de eso que me había sacado por un rato de la siesta. 

Voy por los recodos de barro y los pasillos llenos
de hipos y de ovillos...
sumerjo los pies para dejar que los peces boqueen entre los dedos...

Me pierdo un rato y me revuelvo con cuchara de sopa...
ya no corro, ya no trato de buscar pepitas, ya no, ya no. 
El final es principio y el laberinto, un reloj sin minutero.    




Exhibit labels
Foto sacada por Mariana Pugliese
Este fue el libro que releí en enero. No fue fácil porque tenía a mi bebé recién nacido y mi "serprimeriza" entre las manos. Sin embargo entre comida y dormida logré poder hacerme tiempos cortos porque hace rato tenía ganas de re-abordarlo.

Para el que no conoce el escrito le recomiendo la lectura. Es un texto muy interesante que analiza la escritura de carteles en los museos y da pautas para lograr que sean "amigables" e "interpretativos".

Cuando leí el libro por primera vez había hecho foco en lo formal, en el poco tiempo que pasan los visitantes en las muestras y en lo importante que era elegir bien las palabras y buscar frases provocadoras o preguntas incisivas. En esta segunda vuelta aparecieron detalles a los que no había prestado atención y me quedé dando vueltas en lo complejo que puede ser escribir unas pocas palabras... ..



Neil Postman
No me acordaba que él hubiera escrito el prólogo ni que ella lo citara a lo largo del texto. Ahí van dos de las ideas suyas que siguieron resonando en mi cabeza en los días posteriores a la lectura: 

  • En el prólogo nombra al museo como una forma de teatro en donde se cuentan historias. "Un lugar de relatos grandes y pequeños sobre lo que significa y es importante para ser un ser humano" (Serrell, 1996)... Me gusta esta mirada porque implica que en los museos hay espacio para lo "exhibible" y lo "espectable". Hay lugar para que la verdad, lo esencial del ser humano, sea contado en forma de historia, de ficción. Una forma de relato que aunque se presente como "la realidad" siempre va a ser una escenografía llena de actores listos a salir a escena para fascinar y dejar espacio para las interpretaciones múltiples. 

  • En el capítulo sobre los carteles interpretativos cita del libro " The End of Education" los cinco "relatos actuales" según Postman . Cinco temas que según él nos interesan en el presente y son la base de nuestras preocupaciones en la vida cotidiana. La lista es la siguiente: 1)Obligación moral de cuidar la naturaleza 2)Los seres humanos cometemos errores y podemos corregirlos. 3)Siempre la mirada es subjetiva y hay al menos dos bandos que argumentan cosas distintas. 4)La diversidad es parte de la construcción. 5)Las palabras transforman el mundo y nos transforman a nosotros. Es interesante ver estas ideas atravesando el mundo de los museos. No es raro, por ejemplo, que aparezcan palabras como  "reciclaje", "ecológico", "orgánico" en los textos de los folletos y que sintamos empatía al leerlas. Tampoco que aparezcan carteles con diferentes versiones de la misma historia y material para reflexionar sobre nuestros errores del presente como los análisis sobre el racismo actual (Vean por ejemplo este video que circuló hace un tiempo por Facebook hecho por el programa "Racismo en México"). Las palabras son parte de nuestras búsquedas y ya no las sentimos transparentes y unívocas, por eso discutimos sentidos y nos lleva tiempo elegir las frases. Entendemos la vida como algo difícil de entender y de decodificar, por eso no es raro que cuando leemos la biografía de un artista en un panel, no esperemos el recorrido lineal y épico que se proponía a principios del siglo XX, sino que disfrutemos viendo la diversidad de situaciones que influyeron en su producción. 

Carteles
Escribir algo tan corto como un cartel exige mucho esfuerzo y aunque se busque la claridad es importante poder poner en marcha ideas potentes y complejas. A continuación les dejo los puntos que más me llamaron la atención esta vuelta:

  • En los zoológicos los carteles tienen que lidiar con el hecho de que los animales no estén o se hayan quedado dormidos ¡Nunca lo había pensado! ¿Cómo hacer un cartel lo suficientemente atractivo como para compensar la posible falta de "objeto"? ¿Basta con lo descriptivo? Tal vez sea importante que los datos sensoriales sean más intensos...no sé...Quizás haya que buscar algún recurso para que la persona se quede el mayor tiempo posible y que se conecte con distintas ideas y emociones aunque ese día no vea al animal en cuestión...La autora plantea estrategias como el humor, una buena pregunta o la provocación...Creo que es un tema para seguir pensando...Dejo dos textos citados por ella que me gustaron:   “Los calamares tienen orgías pero los pulpos tienen encuentros cercanos.”(...)   “¿Por qué los tiburones no se comen a los otros peces que viven con ellos en el tanque?” (Serrell, 1996)  

  • El estilo que usan los redactores del National Geographic para  los epígrafes de sus fotos tiene un formato elaborado en donde se busca una relación potente entre imagen y texto. Para lograrlo usan la estrategia de nombrar lo que se ve en la imagen de manera concreta, usar verbos activos y en tiempo presente. Va un ejemplo citado en el libro.  " [Debajo de una foto que muestra a una mujer parada frente a un espejo] Con una última mirada , una bailarina del prostíbulo de Ariguemes chequea su vestido antes de salir al escenario. Cuando su striptease termine ella se cambiará la ropa de trabajo e invitará a los clientes a tomar tragos. (Serrell, 1996) 

  • Calculando el poco tiempo que pasan las personas en los museos (entre diez y veinte minutos promedio) y el tiempo que se tarda en leer (250 palabras por minuto) el número ideal de palabras para cada cartel sería de...¡50 palabras! Si bien ella insiste en la importancia de no usar esto como regla y que es más importante encontrar las frases justas para cada texto, es interesante pensar en la cortedad como marco.En la era de las redes sociales esto no debiera provocarnos sorpresa porque nos la pasamos intentando conmover y comunicarnos en pocas palabras. Sabemos de correcciones porque tenemos claro que una vez que lanzamos  una frase habrá lectores del otro lado. Nos interesa la reacción del "público" porque esperamos con ansiedad los comentarios de los otros y esperamos haber sido lo suficientemente significativos y potentes para que los "otros" se dignen a escribir a partir de lo propio. Pensando en esto es que volví a leer microrrelatos para encontrar tintes literarios en esta economía de letras, puntos y comas (en el blog "sucedeque" hay un post sobre mircorrelatos famosos . También es interesante leer algunos relatos del concurso del Museo de la Palabra)

  • Cada cartel debe tener "recompensa interna". Beverly Serrell insiste en que el aprendizaje en los museos es voluntario, por eso pensar en pequeños premios para aquellos que leen el texto por completo es una buena manera de invitarlos a seguir leyendo.  Esto me hizo acordar a las palabras de Sanchis Sinisterra sobre la importancia del final en las obras de teatro y cómo éste ilumina todo lo precedente dándole un lustre particular a la pieza en cuestión...(En el post "Un museo de España..."  cito la frase). Este es el cartel que ella propone como ejemplo: "En 1847 esta campana colgaba de la cúpula de la iglesia de la congregación. Más tarde se convirtió en la alarma de fuego del pueblo. También sonaba a las nueve en punto marcando el toque de queda cuando todos los  jóvenes debían estar fuera de las calles o tener una muy buena excusa de porqué no estaban en casa. Lo sé, yo era uno de esos jóvenes. Les Schrader" (Serrell, 1996)

  • Es difícil hacer preguntas en los carteles y no caer en cuestiones obvias o parecer examinadores de una escuela. Me gusta cuando dice que las mejores preguntas son los que los visitantes se hacen a sí mismos y cuenta sobre el tipo de encuestas previas a las exhibiciones en donde se chequean palabras que los visitantes asocian al tema de la muestra. También las ideas que ya tienen del tema y las sensaciones que esperan sentir al entrar a la exhibición. Cito algunos carteles de muestras de Argentina: “¿Qué es ser niño? ¿Te acordás de los lugares que no alcanzabas cuando eras chico?” “ [Frente a un arenero común] ¿Cuánto vale este estupendo juego?   (Muestra “Frato en volumen” ) “¿Odiás esta pintura? ¿Quién dijo que tenía que gustarte?” (Fisman, 2009) 

  • La voz de los carteles no es algo menor. En cada exhibición se decide quién es quién cuenta, la voz que habla...Puede ser la de un experto, un amigo cercano, un docente experimentado, una voz institucional, algún protagonista real o ficticio...De Argentina siempre me llamaron la atención los carteles del Museo de la Ciudad porque son coloquiales y parecen comentarios de la vecina de al lado. Y los que me encantan particularmente son los del Museo Ingeniero White por su manera directa, política, humorística y poética en palabras simples y cotidianas:  " [Frente a una foto de enanos de jardín con la mano levantada] Saludamos al enano fascita que llevamos dentro "(Museo Ingeniero White) En el libro aparece también la posibilidad de usar citas textuales como recurso:  " [Frente a una máscara precolombina rota y con cara de susto] Mi abuela me contó que cuando llegó el cristianismo su tío bajó a la playa y quemó todo lo que había . Había escuchado que Dios no recibe a nadie que guarda sus tesoros. Mujer Kitamaat  "  (Serrell, 1996)

Y así...
Y así va terminando el post de un libro leído dos veces, un post que intenta justificar mi vuelta a un mismo libro, tal vez un post que no hace más que hablar del deseo de volver a conectarme con aquello que me dio un tipo particular de felicidad...

Orhan Pamuk
 "(...)la mayoría de las cosas que lees en una novela te las olvidas. Pero te quedas con una impresión. La alegría. El gozo. La sensación de descubrimiento que esa novela te dio. Muchos de los detalles se olvidan. La segunda vez que lees la novela prestas atención a otros detalles." (Andrés Hax-entrevista a Orhan Pamuk -revista Ñ)

1 comentario:

  1. Excelente artículo !
    Qué lujo que haya personas como vos en un mundo tan virtual y deshumanizado que nos regale estos párrafos de puro arte y literatura.
    Gracias por compartir este blog y seguinos deleitando con tus reflexiones hechas texto.
    Saludos,
    Andres (maestro)

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